El abogado especializado en urbanismo Francisco Zaragoza Ivars ha advertido que ahora es obligatorio presentar las coordenadas de los mapas en los proyectos de reparcelación “algo que parece fácil pero que es un engorro para los técnicos”
Marbella, 25 de enero de 2025.- El XX Curso de Experto en Urbanismo que organiza el Instituto de Estudios de Urbanismo se ha adentrado en las novedades que las nuevas tecnologías han propiciado en algunos procedimientos como el caso de la “georreferenciación”. El abogado especializado en la materia Francisco Zaragoza Ivars ha advertido que ahora es obligatorio presentar las coordenadas de los mapas en los proyectos de reparcelación, “algo que parece fácil pero que es un engorro, sobre todo para los técnicos”.
En su ponencia titulada “La reparcelación y el proyecto de reparcelación. Aspectos registrales”, Zaragoza Ivars, ha señalado que la georreferenciación de los planos “antes no se exigía, pero ahora sí, y parece algo fácil, pero vuelve locos a los técnicos que tienen que hacer el cotejo casi exacto de la planimetría que han empleado para hacer la reparcelación con las bases catastrales y con la georreferenciación actualizada”.
Además ha lamentado los problemas que suele haber con los registradores en el momento de inscribir los proyectos de reparcelación una vez que han sido aprobados de manera definitiva. El experto en urbanismo ha incidido en este aspecto asegurando que “es habitual que una vez aprobado definitivamente el proyecto de reparcelación, cuando llega el momento de llevarlo al registrador, nos responden con una calificación negativa, no inscribiendo el proyecto por supuestas deficiencias que nos hacen volver a retocarlo, con lo que eso conlleva: volver a publicar, volver a someter a exposición pública, etc.”, lo que provoca, ha denunciado, “retrasos de hasta un año”. Es más, Zaragoza Ivars ha llamado la atención porque “ocurre incluso con el certificado que tiene que emitir el Ayuntamiento, y que se incluirá junto con el propio proyecto de reparcelación”. Y lo que es peor: “en casos en los que además no tienen razón para oponerse como identificar un titular desconocido como un propietario no adherido”.
Por otra parte ha celebrado que en algunas comunidades autónomas “se siga usando el ‘reglamento de gestión de 1978’, uno de los mejores que han existido”, que refleja que las fincas de resultado de la reparcelación “se le tienen que adjudicar al propietario en la misma finca de origen o lo más próxima a ella, o que la aprobación definitiva es el que produce la transmisión de las fincas de cesión a favor del Ayuntamiento, o que las nuevas fincas y las personas titulares de las mismas quedan afectas hasta el final a los pagos por los gastos de urbanización, etc”. Ha destacado en concreto el artículo 113, sobre la formalización de la inscripción de la reparcelación.
Junto a Zaragoza Ivars ha intervenido con una ponencia de contenido similar, “La reparcelación y el proyecto de reparcelación”, el que fue director general de Urbanismo de la Junta de Andalucía, Daniel Fernández Navarro. También abogado experto en urbanismo ha señalado que, sobre el papel, si hay que modificar el proyecto de reparcelación por las alegaciones que haya recibido de parte de distintos propietarios, “se vuelve a dar trámite de información pública durante 15 días pero solo a los propietarios afectados por el cambio que conllevase la alegación”, algo que a su juicio, “es algo muy teórico porque la mayoría de las veces les incumbe a todos los propietarios”.
También en lo que a la tramitación y aprobación del proyecto de reparcelación se refiere, para evitar las “trabas” con las que se encuentran cuando se inscriben en el Registro de la Propiedad, ha aconsejado que “al mismo tiempo que vamos tramitando, redactando y formulando el proyecto de reparcelación, tenemos que coordinarnos con el registrador y llevarle el documento mucho antes de la aprobación para que lo que le vamos a presentar no tenga obstáculo alguno registral, porque los reparos pueden ser nimios pero hay algunos defectos que comprometen la viabilidad del proyecto desde su origen”.